Hoy en día, somos conscientes que la nuevas herramientas tecnológicas son muy importantes para encaminar los procesos educativos. Una de estas son los Software.
Los Software, llegan a la escuela a través de vendedores que quizás no sepan la trascendencia educativa que tiene dicha herramienta. Por eso es importante antes de acceder a un software para la escuela, que sepamos como poder evaluarlo y determinar la función y la real relevancia que tiene para los docentes y para los estudiantes y si sirve o no para encaminar los procesos educativos.
Para verificar que un software sirve para la escuela, se debe tener claro que este, orienta un uso pedagógicamente adecuado. es decir, que debe contener la metodología apropiada para lo que se pretende enseñar. Por ende, se debe examinar, si tiene la descripción de los programas que se necesitan para ejecutar el software, si se puede aprender a manejar fácilmente, si tiene el contenido necesario para determinar un aprendizaje o si concuerda con los conocimientos previos. Igualmente, se debe evaluar si el idioma y los diálogos son coherentes y claros e igual que la terminología que maneja. Además que se pueda hacer varias tareas, que varios usuarios puedan manejarlo, que estimule los logros y se pueda corregir los errores cuando se hacen las actividades. Y algo muy importante en un software educativo es que los contenidos tengan intenciones formativas, que tenga una adecuación curricular de los diferentes grados, que sean amenos a la vista, es decir que llamen la atención y sean innovadores.
Un Software, se puede introducir al aula, sin determinar los puntos anteriormente mencionados, pero a medida que se utilice se deben analizar y hacer una reflexión si es útil o no, si se puede implementar como medio educativo, si este cumple con una evaluación satisfactoria se implementa, se registran sus cualidades, sus fortalezas, sus posibles desventajas y se difunde a otros para que lo utilicen.
